Si tus servicios no requieren tu intervención, es decir, están automatizados (como una aplicación web que has desarrollado, o la descarga de un iBook que escribiste hace tiempo), se aplican estas reglas:

• Si tu cliente es B2B (una empresa) Europea con número de VAT válido, no añades IVA (0%) y pones la misma cláusula.
• Por el contrario, si tu cliente no tiene número VAT, pero es de Europa (individual o empresa), añades el IVA de su país de origen a la factura. Para un cliente Español, eso sería un 21%.
• Finalmente, si tu cliente está fuera de Europa, no añades IVA (0%).

Para casos en que vuestro producto se venda a particulares, y además se descargue de manera totalmente automática, sin intervención humana, se considera que entra en la categoría de “descargas online”.

Como para este tipo de descargas sería inviable pagar el VAT cobrado a los países de cada uno de vuestros clientes, se creó un esquema llamado MOSS. En dicho esquema se declara todo el VAT cobrado a todos vuestros clientes en toda Europa a las autoridades Estonias solo. Después, una vez por trimestre, el gobierno de Estonia os pide que le paguéis el dinero correspondiente a dicho trimestre, y distribuye a cada país Europeo lo que le toca. Este procedimiento es bastante conveniente para evitar costes y tiempo a las empresas.

Por lo tanto, si entráis en la categoría de descargas digitales, es necesario registraros en el esquema MOSS (Mini One Stop Shop), especificando cuáles de vuestros productos caen dentro de esa categoría, y hacer declaraciones trimestrales de IVA. Tenéis que informarnos para que solicitemos la documentación y os hagamos firmar la declaración del MOSS.

Mientras vendáis menos de 10.000 euros al año en total, estáis exentos de apuntaros al MOSS. Por lo tanto, nuestra recomendación es que cuando empecéis, y hasta no superar los 10.000€ al año en ningún país, es que no os apuntéis al MOSS, y en ese caso cobréis a vuestros clientes el VAT Estonio (20%).

Aquí tenéis el enlace a la normativa Europea.